domingo, 31 de mayo de 2009

Pensamientos

En aquel Camino del bosque, él me perseguia.
Intenté escapar de sus ataduras, pero él seguía amarrándolas y anudandolas contra mi ser. Fue en aquel momento donde divisé aquella cascada, aquel momento que trajo los mil y un pensamientos sobre lo que alli habia pasado hace mucho tiempo, en ese momento me anudó contra él, sin ninguna escapatoria....
Vi a un ciervo correr, asustado...
¿Porqué se habría asustado? ¿De mis gritos? ¿De mis pensamientos?
No, eso no podía ser. Se había asustado de él, de aquel ser manipulador.
Ahora lo recuerdo todo claramente... El ciervo se asustó de él porque eran cazador-presa.
El manipulador resultó ser un vampiro, sediento de mi sangre, sediento de la sangre del ciervo, sediento de cualquier líquido rojo oscuro de temperatura tibia.